Reciprocidad en las empresas
La reciprocidad es un factor muy importante en todas las organizaciones a nivel mundial, pues promueve el que las personas puedan construir una dinámica de dar y recibir promoviendo un espacio de trabajo donde la personas puedan promover la generosidad, espacios de intercambio respetuosos y basados en la confianza.
La reciprocidad es algo que sucede muy a menudo entre familiares y amigos. A nivel histórico, hay anécdotas increíbles donde el trueque se ha reconocido como una estrategia muy común y positiva, pues a través del intercambio se genera un espacio de interrelación donde el dar es un honor y donde para recibir tienes siempre que dar algo a cambio. Cuando no hay reciprocidad, la red se rompe.
Anillos de reciprocidad
El anillo de reciprocidad es una actividad vivencial y activa que tiene como intención fortalecer las relaciones humanas dentro de las organizaciones. El método fue desarrollado por Cheryl y Wayne Baker de la Universidad de Michigan hace más de veinte años cuando buscaron crear una metodología que fortaleciera las redes humanas a través del acto de dar y recibir.
Adam Grant en su libro “Give and Take”, habla de esta dinámica y resalta sus grandes beneficios tales como son mejorar la manera de compartir conocimientos, fomentar una cultura más generosa, promover mayor interacción social logrando impulsar el capital social construyendo así relaciones más fuertes en las organizaciones.
Dentro de las organizaciones, el dar y recibir promueve ambientes de mayor confianza, mayor conocimiento interpersonal, fortalecimiento de lazos sociales y mayor empatía entre muchos otros.
Exemplo de la estrategia
En una organización importante, un vicepresidente mandó correos a todos los colaboradores diciendo que tenían una misión secreta qué consistía en qué todos los empleados tenían que hacer algo que a ellos les gustaba y que, al mismo tiempo, pudiera beneficiar a otras personas.
Durante todo ese año el vicepresidente estuvo registrando cómo iban las misiones secretas y de acuerdo con él cerca de dos tercios de los empleados hicieron un esfuerzo para ayudar a los demás. Esto provocó mayores niveles de empatía, colaboración y un mayor sentido de amabilidad dentro de la organización.
El anillo de reciprocidad tiene los siguientes beneficios:
- Se conocen las personas de forma más íntima
- Se rompen estereotipos
- Se solucionan problemas reales
- Ahorros en costos
- Ahorros en tiempo
- Construye un sentido de comunidad
- Fortalece el bienestar físico y mental
- Se crea un ambiente de gentileza
- Se aprecia más al otro cuando hacemos algo por él o ella
“La reciprocidad es el motor del capital social”
– Wayne Baker
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